Ono Ozaki, el multideportista que creó ocho retos extremos relacionados con la forma espiritual para alcanzar el NIRVANA y que falleció al ponerlo en práctica.
Ono Ozaki fue un activista ecológico experto en deportes extremos, siendo considerado el primer multideportista extremo. Fue el creador de una de las hazañas más increíbles y casi imposibles dentro del mundo extremo, “Las Ocho de Ozaki”.
Esto es un test en honor a las fuerzas de la naturaleza que desafían las capacidades del ser humano en lo extremo, buscando un equilibro entre lo físico y mental de frente a la naturaleza desapegándose de lo material y las costumbres.
“Las Ocho de Ozaki” hoy en día se consideran como un mito por su extrema dificultad en lograrlas, además de que nadie ha logrado realizarlas en su totalidad.
Su principal objetivo se enfoca en “ser uno en cuerpo, mente y espíritu” a través de actividades extremas hechas en los lugares más peligrosos del planeta. Esta hazaña no se trata de un deporte, de una competencia o un evento de medalla, sino se trata de la pureza que puedas lograr para alcanzar el NIRVANA (Punto máximo de iluminación espiritual).
Una vez entendido el objetivo, aquí les hablaremos de las ocho pruebas que Ozaki creó y algunos de los ejemplos de lugares y actividades que se pueden desarrollar:
1. Fuerza emergente
Consiste en saltar en paracaídas de una altura con la cual puedas cruzar las nubes. No hay una locación específica. Es una actividad que se puede realizar en cualquier lugar.
2. Nacimiento del cielo
“Volar como si fueras un animal por los cielos”. Skydiving. Se recomienda hacer en el monte Everest, el cual es uno de los picos más altos del mundo.
3. El despertar de la Tierra
“Atravesar la tierra hasta su intimidad” es sinónimo de caer en picada con paracaídas. La cueva de las golondrinas en México es el lugar ideal para conseguir este reto; un abismo en la Tierra creado por la erosión del agua con una profundidad de 512 metros aproximados y un diámetro de 60 metros.
4. Vida de agua
“Ser uno con el agua”: surfear. Mavericks, situada en el mar al sur de San Francisco es el lugar con las olas más peligrosas del mundo, en donde cada año surfistas expertos pueden completar este reto, sin embargo, la naturaleza siempre se impone. Las olas llegan a alcanzar de 8 a 15 metros de altura, recorriendo hasta 300 metros de longitud y un viento casi nulo.
5. Vida de viento
“Ser uno con el viento”: skydiving. “El Eiger” en Suiza es el indicado, aunque en la mayor parte del mundo el base jump es ilegal, en Suiza no lo es, teniendo el país 17 lugares destinados para realizar está actividad. “El Eiger” es una montaña de 3.967 metros de altura y es en la zona de “El Hongo” en donde encontrarás la base jump más famosa para miles de turistas.
6. Vida de hielo
“Ser uno con el hielo”: snowboarding. Consiste en bajar una ladera rocosa y helada sobre una tabla de snowboard. “La Black Ibex”, en Austria, está pendiente para esquiar es la más pronunciada en los Alpes, con una inclinación de casi el 88%. Numerosos accidentes son registradas diariamente en el lugar. Solo es apta para profesionales de snowboard y de deportes extremos.
7. Maestro de seis vidas
Las primeras seis pruebas de Ozaki trabajan con la gravedad, en su mayoría yendo de arriba hacia abajo. Está es al revés. Consiste en escalar una montaña, por ello el mejor ejemplo es el muro de piedra junto a la catarata más alta del mundo con una altura de 979 metros: el “Salto de Angel”, en Venezuela; junto “Catarata del Paraíso” que sale en la película animada “UP”.
8. Último acto de fe
“Pon tu vida en manos de la Tierra”, la octava y última prueba es algo que no se puede planear y sólo se comprenderá cuando suceda. Esto lo sabrás más fácil entendiendo que tu espíritu y alma ya están en un nivel superior, desapegado de lo físico y lo material en su totalidad. La última prueba tiene como objetivo, probar la lealtad misma.
“Las ocho de Ozaki” son más que nada consideradas un mito que se viralizó gracias a la película “Point Break” en donde se trata de conseguir cada uno de los retos y nos muestra el proceso para conseguirlo. Sin embargo, cada uno sabrá qué creer sobre esta hazaña. Ono Ozaki, quien creó esté concepto, falleció tratando de cumplir el tercer nivel.